Sony ha presentado recientemente una nueva patente que podría revolucionar la forma en que experimentamos los juegos reduciendo significativamente la latencia en el futuro hardware. La patente, titulada "Release de entrada/acción cronometrada", presenta un enfoque innovador para minimizar el retraso entre la entrada de un jugador y la respuesta del juego, aprovechando un modelo de IA y sensores adicionales. Este desarrollo se produce a raíz de la introducción de Sony de la super resolución espectral de PlayStation (PSSR) con el PlayStation 5 Pro, que, aunque es capaz de mejorar a 4K, puede introducir latencia con tecnologías gráficas más nuevas como la generación de cuadros.
La latencia ha sido un desafío persistente en los juegos, lo que a menudo hace que los juegos se sientan menos receptivos a pesar del aumento en las tasas de cuadros. Tanto AMD como NVIDIA han abordado este problema con tecnologías como Radeon Anti-Lag y Nvidia Reflex, respectivamente. La patente de Sony sugiere una solución única que implica predecir las entradas de los usuarios a través de un modelo de IA de aprendizaje automático, potencialmente ayudado por sensores externos como una cámara enfocada en el controlador para anticipar qué botón podría presionar un jugador a continuación. La patente explica: "En un ejemplo particular, el método puede incluir la entrada de la cámara como entrada para un modelo de aprendizaje automático (ML). La entrada de la cámara puede indicar el primer comando de usuario".
El enfoque de Sony tiene como objetivo optimizar la "liberación cronometrada de los comandos del usuario", como señala la compañía en la patente, "puede haber latencia entre la acción de entrada del usuario y el procesamiento y ejecución posteriores del sistema del comando. Esto a su vez resulta en la ejecución retrasada del comando y las consecuencias no intencionadas en el juego en sí". Al predecir las entradas, Sony espera reducir esta latencia, mejorando la experiencia del juego, particularmente en géneros como tiradores de contracción que exigen altos marcos y baja latencia.
Otro aspecto intrigante de la patente es el uso potencial de los botones del controlador como sensores, insinuando el continuo interés de Sony en los botones analógicos para los controladores de próxima generación. Si bien la implementación exacta en futuras consolas como PlayStation 6 sigue siendo incierta, esta patente demuestra el compromiso de Sony de reducir la latencia sin comprometer la capacidad de respuesta de los juegos. Esto es especialmente relevante con el aumento de las tecnologías de renderizado como FSR 3 y DLSS 3, que puede agregar latencia de cuadro a los juegos.
Aunque no está claro si esta tecnología se adoptará exactamente como se describe en la patente, es evidente que Sony está explorando soluciones innovadoras para mejorar la experiencia del juego. Si esta patente se traduce o no en hardware futuro, está claro que la compañía está dedicada a superar los límites de lo que es posible en los juegos.