El gasto generoso del CEO alimenta la reacción violenta mientras los desarrolladores de Halo y Destiny sufren despidos

Author: Chloe Dec 18,2024

Reestructuración de Bungie: despidos, integración de Sony y controversia con el director ejecutivo

Bungie, el estudio detrás de Destiny y Marathon, está atravesando una importante reestructuración, marcada por importantes despidos y una mayor integración con su empresa matriz, Sony Interactive Entertainment. Esto ha provocado una reacción considerable por parte de los empleados y la comunidad de jugadores.

Despidos masivos y cambio estratégico:

Pete Parsons, director ejecutivo de Bungie, anunció la eliminación de aproximadamente 220 puestos (17 % de la fuerza laboral). Los despidos, que afectaron a todos los niveles de la empresa, se atribuyeron al aumento de los costos de desarrollo, los cambios en la industria y los desafíos económicos, incluido el bajo rendimiento de Destiny 2: Lightfall. Parsons citó la expansión demasiado ambiciosa a múltiples franquicias como un factor contribuyente. La reestructuración tiene como objetivo centrar los recursos en los proyectos principales, Destiny y Marathon.

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Integración más profunda con PlayStation Studios:

Tras la adquisición de Sony en 2022, la independencia operativa de Bungie ahora está disminuida. La reestructuración implica la integración de 155 roles en PlayStation Studios durante varios trimestres. Además, se formará un nuevo estudio dentro de PlayStation Studios a partir de uno de los proyectos de incubación de Bungie. Esta alineación más estrecha con los objetivos de Sony marca un alejamiento significativo de la historia independiente de Bungie.

Indignación de los empleados y la comunidad:

Los despidos han generado una reacción significativa por parte de los empleados actuales y anteriores, que expresaron enojo y frustración en las redes sociales. Las críticas se centraron en la percepción de falta de responsabilidad por parte del liderazgo, especialmente en lo que respecta al gasto informado del director ejecutivo Pete Parsons de más de 2,3 millones de dólares en automóviles de lujo desde finales de 2022, incluidas las compras realizadas poco antes y después de los anuncios de despidos. El contraste entre estos gastos y los recortes de empleo alimentó acusaciones de mala gestión y una desconexión entre el liderazgo y los empleados. La comunidad de jugadores también expresó su fuerte desaprobación.

Conclusión:

La reestructuración de Bungie representa un momento crucial en su historia. Si bien la integración con PlayStation Studios puede ofrecer estabilidad, los despidos y la controversia del CEO han dañado gravemente la moral de los empleados y la imagen pública del estudio. Los efectos a largo plazo en la producción creativa y la cultura de Bungie siguen siendo inciertos.